Cachalote - Pottwal

(Physeter macrocephalus) Photo: Gaby BARATHIEU

El cachalote pertenece al suborden de los odontocetos y se distribuye en todos los océanos. La cabeza de esta ballena, que sobresale como una cacerola, ha llevado a que en alemán se la denomine Pottwal, lo que significa ballena cacerola. Si bien estas ballenas aparecen en todos los océanos del mundo, son muy comunes en la zona de las Islas Azores (islas portuguesas ubicadas en el océano Atlántico). Allí fueron fuertemente cazadas, pero una vez finalizada la caza comercial de las mismas se ha desarrollado un turismo ballenero muy intenso. Los cachalotes machos son más grandes y pesados que las hembras, pudiendo alcanzar una longitud de hasta 20 metros y un peso de hasta 50 toneladas. Por eso son los animales dentados más grandes de la Tierra. En esta ballena es distintiva su enorme cabeza rectangular, cuya longitud puede abarcar hasta un tercio del total de su cuerpo. Su peso cerebral puede llegar a ser de hasta 9,5 kg, siendo el mayor del reino animal.

Los ojos son relativamente pequeños y están ubicados a los costados del cráneo. La función de los dientes es mantener agarrada a su presa (peces, calamares gigantes). Los cachalotes también son conocidos por poder emitir unos tonos inusualmente fuertes, cuyos niveles de presión acústica pudieron ser medidos en hasta 230 dB. El espiráculo, una pequeña apertura en forma de „s“, está ubicado en la parte frontal izquierda de la cabeza y les permite generar el chorro de agua tan típico que puede ser visto desde muy lejos.

Efectos de la esencia: Los cachalotes son cuidadores de la Tierra y nos conectan con la quinta dimensión. Nos recuerdan la conservación de la Creación de Dios. Su forma parecida a un embrión nos recuerda la importancia de mantener en su forma original al ADN y de volver a desarrolla esta sustancia ancestral (a regenerarla energéticamente).