Salamandra - Feuersalamander

(Salamandra maculosa)

La Salamandra en la Mitología: Existen muchas supersticiones alrededor de la salamandra. Antiguamente las personas creían que el fuego no las dañaba, al observar cómo el animal salía desde troncos que ya estaban parcialmente en llamas. En la Antigua Grecia las salamandras se relacionaban con el dios del fuego, Hefesto, para los romanos, Vulcano. En la alquimia y en los rituales de los elementos, la salamandra corresponde al elemento fuego. También Paracelsus le adjudicó a la salamandra el alma elemental del fuego. Ella es el símbolo para el cambio y la transformación. Asimismo encontramos, en el Antiguo Testamento de la Biblia, una historia. En Daniel 3.1 se relata cómo tres muchachos estaban siendo quemados por el fuego del sacrificio al haberle rezado a un ídolo pagano. Vino un ángel a ayudarlos y los salvó de las llamas destructivas. Ellos contaron sobre un viento de rocío fresco que los protegió del horno y su tributo es a la salamandra.

La Salamandra en la interpretación de los sueños: representa a la fuerza de acción incontrolada. Esto puede indicar tanto una energía positiva para un propósito como una fuerza incontrolada desde el inconsciente.

La Esencia de Salamandra: La salamandra nos recuerda amorosamente nuestro pasado y nos ayuda a integrarlo. Los anfibios representan una escala evolutiva muy antigua dentro de la historia de la evolución del reino animal.

En el plano físico: La salamandra ayuda a equilibrar el fuego de las personas y a regenerarlo. El fuego es fuerza de acción, realización, empuje, calor, poder creativo, entusiasmo, sexualidad. Si hemos abusado de esta energía, tenemos un desequilibrio energético. La salamandra ayuda a regenerar esta fuerza y a equilibrarla energéticamente. En sesiones de acupuntura, la esencia actúa muy bien en los puntos de los meridianos que le corresponden al elemento fuego. Posee una fuerte fuerza de regeneración.

En el plano emocional: La salamandra ayuda a utilizar nuestra fuerza y a sanar antiguas heridas. Sentimientos que han sido heridos en el pasado pueden ser sanados energéticamente. Tomamos consciencia de nuestra rica herencia y así podemos aumentar nuestra autoestima.

En el plano espiritual: La esencia de salamandra puede ayudar a las personas que están desarraigadas interiormente, ya sea por haber emigrado o chicos que no conocen a sus padres o su origen. Amorosamente se nos recuerda nuestro origen a través de sueños y sensaciones. Así se nos permite mirar nuestros orígenes ricos en pasado y tradiciones, los que nos llenan de orgullo y elevan nuestra autoestima. Si en este aspecto hubieran existido conflictos o problemas, la esencia nos ayuda a desarrollar comprensión y humildad, pudiendo ir soltando viejos conflictos, para que no nos sigan bloqueando, para que nuestro poder de concreción y el amor por la vida se puedan desarrollar plenamente. Podemos integrar amorosamente nuestro origen genético y cultural.